¿Qué es la vitamina D?
Este indispensable elemento también llamado calciferol es una de las vitaminas liposolubles necesarias para el desarrollo óseo y la absorción de calcio por parte del intestino, garantiza la mineralización de los huesos, interviene en la coagulación de la sangre, tiene un papel preponderante en el sistema nervioso, inmunitario y muscular. Nuestro cuerpo la genera naturalmente cuando nos exponemos al sol.
Causas, trastornos y tratamiento de las deficiencias de vitamina D.
Si bien, el cuerpo es capaz de sintetizarla a través de la exposición a los rayos solares, una exposición insuficiente, una deficiencia alimentaria, una insuficiencia en su asimilación, un fallo hepático o renal o ciertos fármacos que impiden su absorción, provocan una deficiencia de la vitamina D, que nos puede ocasionar una serie de trastornos como:
- Pérdida de la densidad ósea que predispone a sufrir fracturas.
- Osteoporosis
- Osteomalacia que alcanza a debilitar también a los músculos.
- Esclerosis múltiple.
- Cáncer
- Diabetes
La medicina actual trata estas deficiencias con vitamina D dos y tres según el caso. Hasta los dieciocho años de edad se aconseja dos mil UI por día y desde los diecinueve hasta los setenta años, cinco mil UI por día.
Los alimentos aconsejables para metabolizarla son: el hígado y la leche vacunos, los huevos, los hongos, los quesos, los pescados azules y los grasos como el atún, el salmón y la caballa, los cereales y el jugo de naranja.
Como a través de la alimentación sólo asimilamos un diez por ciento de lo que necesitaríamos para satisfacer la demanda del cuerpo y actualmente dado el cambio ambiental, tomar sol se ha vuelto un tanto riesgoso y se deben usar protectores solares, es necesario tomar suplementos y dosis para evitar los efectos dañinos de su deficiencia.